alf manz
contra scotland yardEl protagonistas un jefe del Estado Mayor del F. B. I., encargado de buscar en Inglaterra a un hombre de ciencia que escapó de Estados Unidos con un secreto capaz de desencaden
crimen y justiciaEntre el hampa y en los bajos fondos de la gran ciudad, se comete un delito que atrae la atención pública. Los servidores del F. B I investigan, interrogan, escudriñan hasta en
desperaoPadre: yo soy inocente. Van a ahorcarme dentro de unos cuantos minutos, pero yo no maté a ese hombre. El pastor, sentado frente a mí en el otro camastro, me miraba a través de
destinos cruzadosÉste, con las mejillas encendidas, se arrellanó en el diván, tomando actitud de enojado por haberle rehusado la joven un beso. La devoraba con los ojos, mientras se llevaba la
dingoLA DENSA CALMA de la noche en aquel arrabal de Washington fue turbada por doce campanadas de grave son. Bajos nubarrones celaban la titilación de las estrellas. Algo indefinido
doctor xEn la novela 'Doctor X' un herido y postrado G-man, imposibilitado para concluir la misión encomendada y autoimpuesta pide ayuda a un estafador sinverguenza, pero de noble cora
el cobardeA las tres de la madrugada, la gran ciudad de Washington (residencia de los organismos rectores de La Federación), reposaba de las abrumadoras fatigas del día; sus ciudadanos,
el deportadoJACK Godfrey revolvíase inquieto en su jergón de crin vegetal. Realmente, le era imposible conciliar el sueño. Lo de menos hubieran sido las durezas del apelmazado lecho, que s
el hombre de la camelia escarlataJAMES Thompson telefoneó a Ruark a los dos días de haber estado en «Monkey». —Hemos detenido a Tisdale y al resto de su banda, George. Tendrás que molestarte en acudir personal
el hombre sin nombreBASTA por hoy, señores. Mañana estudiaremos las maneras de comportarse de un hombre embriagado. En la vida del espía, más de una vez hay que simular una borrachera, en sus dist
el vengador negroUn «gángster» de ideas tenebrosas sufre la evolución mayor que se pueda tener, a causa de un choque espiritual rayano en tragedia. Su corazón encenagado sufre una transformació
entre rejasUn murmullo «en crescendo», impresionante, se elevaba de las galerías. En la prisión de Bowmanton, Pennsylvania, a las tres de la madrugada, dos condenados a muerte iban a ser
fbi contra crimen s.a.En el número 200 “FBI contra crimen S.A”, último de la colección publicado por Alf Manz, incorpora en sus páginas centrales diversas fotos del FBI, entre ellas una foto firmada
forajidoComo cuatro centauros fantasmales galopaban en aquella tibia noche, bajo el cielo estrellado de Missouri. Las herraduras resquebrajaban la reseca costra del camino a Greensburg
hampa de fracEL largo y feo coche celular describió un arco en el gran patio de la prisión de la Santé, rozando los muros, altos, viejos y horadados por ventanucos enrejados. Fue a deteners
jack, el invencibleNO es usted demasiado impulsivo? —preguntó ella, sonriendo, y echando hacia atrás la cabeza para rehuir los labios que buscaban los suyos. —No sonría así, por favor; que me ent
la hora gris¿HOMBRRE? ¿MONSTRUO? ¿DEMONIO? El elegante criminal de la sonrisa diabólica convertía a sus secuaces en fieros asesinos bajo los efectos del hashish, la enloquecedora droga ori
la maffiaLa Maffia. La misteriosa y criminal organización siciliana, con ramificaciones en el mundo entero, sus «vendettas» implacables e inexorables, sin piedad y sin reparar en sacrif
odioEl hombre corría a grandes zancadas, flotándole al aire los faldones de la suelta gabardina. No presentó sus excusas a la dama con quien tropezó, y ella, tras recobrar el equil
pasión inmortalCON un frenazo chirriante, se detuvo el «taxi» junto al bordillo de la acera. Desde el interior del vehículo, una mano abrió bruscamente la portezuela. Saltó a tierra un joven,
ríoEl cazador de hombres por recompensa odiaba a todos, al mundo, hasta sí mismo. Un misterioso cargamento, contrabandistas, desertores y asesinos huyendo de la civilización para
secreto en coreaEl sol anunciaba su salida por la línea lejana del horizonte manchuriano. Las tinieblas de la noche se disipaban al conjuro del alba. Sobre los campos se esparció una luz grisá
shangaiEl doblemente infamante insulto restalló con la violencia de un latigazo en la sala de recreo. Cesó el anterior murmullo de las conversaciones y el tintineo de las copas en el
tángerAZIM subía los peldaños de la escalera procurando no hacer ruido. Echaba de menos sus habituales babuchas, no se acomodaba a la vestimenta europea: la chaqueta le estaba estrec
tinieblasEn la noche neoyorquina un terror mortal se extiende sobre la ciudad a la vez que sobre sus tejados sopla el viento helado del invierno. Nadie osaba salir de sus casas a horas
víctimas del destinoCon los motores dormidos, el submarino se balanceaba suavemente en las aguas temblorosas del océano que iniciaba su despertar. Entre la espesa niebla, la torreta quedaba desdib
yo, director del f.b.i.Para celebrar el centenario de la incomparable colección F. B. l. la única que se ha impuesto netamente en España y en América, EDITORIAL ROLLAN ha editado el número 100 con un
¡culpable!MUROS desnudos, húmedos, encerrando un silencio denso, sobrecogedor. Una sola bombilla pendiendo del bajo techo, luchando su luz espectral con la tétrica lobreguez de la cámara
¡espía!Primer número de una colección dedicada a narrar las aventuras de los componentes de esta organización secreta. Tal como se indica en el título del extenso prólogo de este ejem
¿ha muerto cicerón?Como una sombra, silencioso, el ayuda de cámara del embajador pasó a la habitación contigua, un cuarto de baño todo enlucido de mármol negro. El espejo reflejó uno por uno los