george h. white
al otro lado del universoTerminada la campaña de la Tierra contra los Hombres de Titanio, el autoplaneta emprende una nueva singladura que le llevará a través del desconocido hiperespacio… AL OTRO LADO
alarma en el canalCOMO un monstruo oscilante, a medias entrevisto a través de la niebla, avanzaba por el Támesis el transatlántico «Río de Plata». Las tranquilas aguas del río aparecieron durant
blanca está la noviaLa mansión de los Lawler era una de las mayores de St. Paul, e indiscutiblemente la más suntuosa y cómoda de la media docena que le disputaban su título de mayor antigüedad, po
cada hombre: un destinoPascual Enguídanos Usach (Liria, 13 de diciembre de 1923 - ibídem, 28 de marzo de 2006) fue un escritor español, uno de los clásicos europeos de la ciencia ficción y el decano
cerebros electrónicosMientras regresa de Venus a la Tierra, el Lanza se encuentra con un planeta errante. Debido a un sabotaje, la nave debe efectuar un aterrizaje forzoso y resulta gravemente daña
conquistaremos la tierraNostálgicos de su viejo solar, obligados por una antigua promesa, los valeranos regresan para reconquistar la Tierra. Una profunda emoción embarga a los lejanos descendientes d
contra el imperio de nahumRescatado en un golpe de audacia el autoplaneta VALERA. El joven Almirante Aznar busca la alianza con los pueblos sojuzgados por el Imperio de Nahum, entablando una lucha desig
después de la hora finalLa angustia de unos hombres que, por obra científica, reviven en un aterrador mundo postapocalíptico. ¿Qué hallaron estos seres en el mundo del que la humanidad había sido dest
desterrados en venusComienza la novela con los expedicionarios posados en un lugar más habitable elegido como idóneo para el establecimiento de la primera colonia; por ello, están descargando el m
división equisPlanteada en términos dramáticos la incompatibilidad entre los terrícolas y los Hombres de Silicio, la nación cristiana acomete decididamente la reconquista de Redención. Pero
dos mundos frente a frenteCon esta novela, publicada con el número 14 en la primera edición de Luchadores del Espacio y suprimida en la reedición de la Saga de los Aznar, culmina el primer ciclo de Rede
el ángel de la muerteEntre el polvo y los escombros de una ciudad antiquísima, los arqueólogos valeranos descubren una bellísima mujer. ¿Es una estatua, semblanza de como fueron los seres que habit
el asesino se disculpaLa rubia y agraciada muchacha que salía cargada con un montón de carpetas, estuvo a punto de tropezar con el señor alto y obeso que avanzaba por el pasillo. —¡Oh, Dios mío! — e
el atom s-2Enfundados en sus negros impermeables de goma, los centinelas tiritaban de frío bajo la lluvia. Un automóvil se acercaba al puesto de guardia haciendo sonar el claxon. Las gota
el azote de la humanidadEvadidos del planeta Exilio, donde fueron abandonados por los rebeldes del autoplaneta “Valera”, Miguel Ángel Aznar y un puñado de terrestres regresan a Nahum en demanda de ayu
el capatazDurante tres agotadoras jomadas, Glenn Mace y sus vaqueros cabalgaron desde el alba al anochecer sobre las huellas de los caballos robados en dirección al oeste. En la mañana d
el cielo se tiñó de sangreEl 31 de agosto, viernes, fue sin duda el día más caluroso de aquel verano de 1962, en los Estados Unidos. Para los habitantes del joven Estado de Arizona la jornada sería reco
el clan de los malditosPascual Enguídanos Usach (Liria, 13 de diciembre de 1923 - ibídem, 28 de marzo de 2006) fue un escritor español, uno de los clásicos europeos de la ciencia ficción y el decano
el coloso en rebeldíaTras un viaje de medio siglo, Miguel Ángel Aznar y su familia llegan a la vista de los planetas terrícolas tripulando un autoplaneta cedido por sus amigos de Nahum. El colosal
el ejército fantasmaHango Noda era un científico notable. Como ankorano estaba orgulloso de su patria y creía en la buena fe de la clase dirigente. Había sido educado en una máquina “Psí”, como to
el enigma de los hombres plantaAbandonados por la tripulación del autoplaneta “Valera” en un mundo desconocido, los numerosos miembros de la familia Aznar se encuentran, por los designios de un cruel destino
el expreso de los angelesComo todas las mañanas, con puntualidad cronométrica, Wisner entró en la habitación de su amo a las siete en punto y descorrió las cortinas de la ventana. En la monumental cama
el extraño viaje del dr. mainEn esta curiosa novela, uno de los personajes es un gigante de más de 3 metros de estatura. Un gigante, completamente normal y humano, condenado a ser una criatura desdichada e
el hombre que murió dos vecesUna secretaria acude a la llamada urgente de su jefe extrañada, ya que le suponía en vuelo por motivos de trabajo. Al llegar a su casa encuentra el cadáver tendido en el salón
el imperio milenarioLos exilados de la Tierra llegan por fin a Nahum y se encuentran allí con el fabuloso autoplaneta “Valera”, el cual riñe furiosa y azarosa batalla con la Armada Sideral del Ter
el loco de la linterna rojaAl abrirse la puerta del bar, Ben Laing levantó los ojos y clavó una escrutadora mirada en los dos agentes uniformados que acababan de entrar. La llegada de los policías apenas
el mar devuelve sus muertosEl cadáver fue rescatado del mar al amanecer del 5 de mayo. Des pesqueros de Forio, matrícula de Nápoles, se encontraban rastreando 45 millas al oeste de Ischia, aproximadament
el ofensorEl cansancio del largo viaje hasta Cheyenne, su llegada a la ciudad en el frío de la madrugada, eran recuerdos casi vagos cuando Pike Steeple despertó en su confortable habitac
el planeta misterioso¿Qué fue de Miguel Ángel Aznar y sus amigos al regreso del Tíbet? Nadie quiso creer en la existencia de los Hombres Grises de Venus. Los miembros de la expedición cayeron en el
el planetillo furiosoDespués de un largo viaje a través del hiperespacio, el autoplaneta Valera alcanza un sistema solar de estrellas dobles, donde gravita el planeta Uhlan. Durante una avería de l
el refugio de los diosesPenetrando por segunda vez en el hiperplaneta Negro los astronautas valeranos andan a la búsqueda de un extraño pueblo, los Hombres Rojos de Guandú. Depositarios de una tradici
el reino de las tinieblasDespués de un largo éxodo en el espacio cósmico, los exiliados de la Tierra han encontrado por fin un planeta, donde esperan poder vivir en paz. Sin embargo, ya desde los comie
el retorno de los diosesViajando en el sub-espacio, donde su cosmonave desarrolla velocidades superiores a la de la luz, la familia Aznar regresa a la Tierra… y la encuentra en otra dimensión del tiem
embajador en venusEn Venus, recientemente descubierto, la superpoblada Tierra había volcado sus excedentes humanos y el contenido de sus presidios. Venus era a la vez purgatorio donde se consumí
exilados de la tierraEl hombre de la Tierra, obligado a emigrar de su planeta en busca de una nueva patria llega, por fin, a un mundo habitado de la galaxia Thorbod. Allí un terrible interrogante s
guerra de autómatas¿Alguna vez se ha preguntado usted cómo serán las guerras del futuro? ¿Hasta dónde será capaz de llegar la inventiva del hombre en una futura guerra entre mundos? ¿Qué fantásti
guerra de autoplanetasEl mundo no había conocido nada igual. En el cielo de la Tierra, testigo de largas y apocalípticas batallas, dos colosos se enfrentan librando el más feroz y decisivo de los co
ha muerto el sol«La iniquidad ha sido consumada», anunciaron las estaciones de radio. Y la Humanidad se enfrentó con la más horrible catástrofe ocurrida al mundo desde el Diluvio Universal. Un
heredó un mundoLa trilogía Heredó un mundo, publicada originalmente en la vieja colección Luchadores del Espacio, es un Space Opera clásico creado por uno de los maestros españoles del género
hombres de titanioProcedentes de algún lugar ignoto del Universo, llegan al Reino del Sol unas criaturas de naturaleza extraña. ¿Quiénes son estos seres? ¿Cuáles son sus ocultas intenciones? ¿Es
horizontes sin finLos astronautas valeranos, en un alarde de audacia e ingenio, han penetrado en el planeta negro, un mundo increíble formado por una gigantesca esfera hueca, tan grande que en s
incursión en chinaTaipeh, centro nervioso de la China libre refugiada en la isla de Formosa, quedaba a un lado con su mar de verdosos tejados que descendía en forma de oleadas hacia el puerto. D
intrusos sideralesPascual Enguídanos Usach (Liria, 13 de diciembre de 1923 - ibídem, 28 de marzo de 2006) fue un escritor español, uno de los clásicos europeos de la ciencia ficción y el decano
invasión nahumitaRestituida la supremacía de la raza terrícola en los planetas del sistema de Redención, el autoplaneta «Valera» se dispone a emprender otras empresas cósmicas. La primera de el
juguetes diabólicosLa carta estuvo tres días en la gaveta de alambre sobre la mesa del capitán Milton Scott, pero hasta que aquella mañana el superintendente Warburton le llamó a su despacho, Mil
la abominable bestia grisLos esfuerzos de los planetas para asegurar la paz han resultado vanos. Desde el rojo planeta Marte, oleadas de “platillos volantes” se lanzan al asalto de la Tierra. Es el tem
la bestia capitulaUna larga era de paz ha seguido a la última guerra civil que derrocó al absurdo Imperio Balmer. El autoplaneta «Valera» partió hace años rumbo a los planetas de Redención. Los
la ciudad congeladaEsta novela, tercera de la serie y de la colección, se desarrolla un año después de los acontecimientos narrados en la anterior. Miguel Ángel Aznar y sus amigos, que habían sid
la civilización perdidaViajando a larga distancia en el espacio, el autoplaneta Valera descubre un inmenso y extraño mundo y en él nuevas y sorprendentes formas de vida. Espectadores de la dramática
la conquista de un imperioInvadidas la Tierra y Venus, aplastados sus ejércitos, la Abominable Bestia Gris se enseñorea de los planetas cristianos sometiendo a la Humanidad. Solamente unos pocos millare
la guerra verdeDespués de tres años de ausencia, el autoplaneta «Valera» regresa de las profundidades del espacio para declarar la guerra al Imperio de Nahum. Estos tres años los ha empleado
la horda amarillaDe las estepas del Asia Central surge un caudillo que agrupa bajo su mando a los dispersos estados asiáticos para constituir un nuevo y prepotente Imperio. Bajo el signo del od
la legión del espacioHan transcurrido unos dos años (Enguídanos no aclara si terrestres o venusianos) y el autor pone la narración en boca del príncipe heredero de un poderoso imperio vecino de las
la mina trágicaPascual Enguídanos Usach (Liria, 13 de diciembre de 1923 - ibídem, 28 de marzo de 2006) fue un escritor español, uno de los clásicos europeos de la ciencia ficción y el decano
la muerta habló a tiempoUna gran tormenta descargaba sobre Nueva York en las postrimerías de aquel prematuro anochecer de un día de otoño, mientras el taxi que había tomado en la estación, conducía a
la muerte madrugaAl detener su auto ante la iluminada entrada de “The House Blue”, nombre un tanto caprichoso que no expresaba el verdadero carácter de un club nocturno de acusada mala nota, Ed
la muerte viaja en taxiEran pasadas las seis de la tarde cuando Daniel Haley dejó a su último pasajero en Baker Street. Estaba anocheciendo y hacía frío. Después de consultar el reloj del cuadro de s
la otra tierraEn sus andanzas por el antiuniverso en busca de un nuevo hogar para los tritones, Fidel Aznar padre e hijo llegan a una Antitierra, un planeta idéntico al nuestro aunque algo r
la presaLa caravana de carreras, después de haber escalado la abrupta ladera de las montañas que daban acceso al “cañón”, volvía a descender hacia el río por un camino angosto y serpen
la rebelión de los robotsLos hombres tenían experiencia en el uso de los robots. Conocían sus ventajas y limitaciones, y el peligro de hacerlos demasiado perfectos. Y durante largos milenios evitaron t
la ruta de kansasPascual Enguídanos Usach (Liria, 13 de diciembre de 1923 - ibídem, 28 de marzo de 2006) fue un escritor español, uno de los clásicos europeos de la ciencia ficción y el decano
la tierra despuésHuidos del circumplaneta Atolón, después de una escala imprevista en el pasado, los Aznar encuentran la verdadera Tierra del tiempo presente. ¿Qué ha sucedido en la Tierra desd
las estrellas amenazanLos lectores estarán más cerca que los propios personajes de comprender el ingenioso y sutil mecanismo, mediante el cual, una invasión de la Tierra sería posible hoy mismo… si
las gaviotas lo sabenMax Basehart, pianista mundialmente famoso por su «Sinfonía Espacial», es también todo un conquistador a pesar de la ceguera provocada por un accidente. Envidias y conflictos d
llegó de lejosUna joven periodista que está intentando hacer méritos en su profesión visita de madrugada una comisaría de Nueva York en busca de posibles noticias, encontrándose con un presu
los hombres de venusMiguel Ángel Aznar de Soto, un teniente de las Fuerzas Aéreas norteamericanas, es destinado a pilotar el avión que transporta a los miembros de una agencia de la ONU encargada
los nuevos brujosTransportada al autoplaneta VALERA la fantástica máquina que guarda celosamente los últimos especímenes del pueblo de Izrail, los valeranos contemplan con inquietud una nueva p
los últimos de atolónAl abandonar su patria, los “tapos” se dirigieron a la Tierra en demanda de ayuda, pero en el circumplaneta Atolón quedó un contingente de voluntarios dispuestos a luchar contr
lucha a muerteLucha a muerte entre dos pueblos hermanos, ambos surgidos de una misma familia y, no obstante, separados por un abismo de siglos y una distinta concepción de la vida. El fabulo
mando siniestroUna misión científica explora los inmensos océanos del planeta Solima en busca de recursos alimenticios para la angustiada población del autoplaneta «Valera». En el curso de es
mares tenebrososEl poderoso autoplaneta VALERA, considerado como fortaleza inexpugnable, ha caído por sorpresa en manos de los crueles nahumitas. El más joven de los miembros de la familia Azn
más allá del solLas cinco novelas que constituyen la serie Más allá del Sol fueron publicadas originalmente en la famosa colección Luchadores del espacio de forma paralela a La Saga de los Azn
máximo secretoDe pie ante la mesa, Charlie Hardin inclinaba ligeramente su delgado cuerpo en paciente espera, mientras el vicealmirante Raynesford volvía lentamente las hojas mecanografiadas
motín en valeraLa estrella de los Aznar, que estuvo en riesgo de apagarse para siempre al arribar el autoplaneta «Valera» al Imperio de Nahum, va a recibir un duro golpe cuando la expedición
muerte a los invasoresLa primera voz vino de un jinete que entraba en la Main Street de Muldrow, montando en pelo a un caballo que marchaba al galope. —¡Vienen los yanquis! ¡Vienen los yanquis! Las
muerte en la estratosferaDesde 3.000 metros de altura, inclinando su aeroplano sobre un ala, el comandante David Stewart lanzó una larga mirada sobre la capital de los Estados Unidos que se deslizaba v
noventa horas en blancoPaul B. Ryder se acodó en el antepecho de la ventana y entornó sus inteligentes ojos obscuros. Olfateó el aire y las finas aletas de su nariz romana vibraron gozosas. Auras de
oro en las cumbresa puesta del sol sorprendió a Ralph Styer escalando el abrupto sendero de montaña hacia las altas cumbres del Berthound Pass, de 11.314 pies de elevación, de donde el cálido so
pirateríaEL encuentro tuvo lugar en el “Oriental Bar”, la noche del domingo. Fue una verdadera coincidencia, pues Juan iba raras veces a aquel lugar. Él se encontraba encaramado a una d
policía sideralDerrotado el Imperio Asiático, el mundo, buscando una paz estable, propugna el desarme universal y la creación de una fuerza de policía, cuya misión será salvaguardar la paz en
prisioneros del miedoTodas las dudas que abrigaba Dale Orler, desaparecieron al divisar en la distancia una tenue nubecilla del polvo cruzando rauda la pradera. Apenas el jinete hubo aparecido en l
puente de mandoLos Sadritas, invasores en los planetas terrícolas, no esperaban que el autoplaneta VALERA regresara jamás. En su mentalidad lógica no cabía el absurdo de que los humanos volvi
rastros perdidosEl militar americano Glenn Fremont llega a Austria para hacerse cargo de su pequeño sobrino al haber quedado huérfano tras la muerte de sus padres en un accidente de automóvil.
ratas del muelleNegras nubes de tormenta se acumulaban sobre la ciudad de Nueva York. A las cinco de la tarde parecía de noche. Como grandes tableros de ajedrez se iban encendiendo las ventana
redención no contestaTras haber luchado en la Tierra contra la Bestia Gris y la Armada Imperial de Nahum, el autoplaneta «Valera» regresa al planeta Redención. En aquel mundo deben haber transcurri
regreso a la patriaEl fabuloso autoplaneta “Valera” rinde viaje en el Reino del Sol, disponiéndose a combatir a las alucinantes criaturas de Titanio que tiempo ha expulsaron de aquel planeta a la
robinsones cósmicosPor las últimas décadas del siglo XX, un cohete sideral despegó de la Tierra para llevar a cabo la más prodigiosa hazaña que el hombre pudiera concebir jamás. Viajando a una ve
rumbo a lo desconocidoDesde el ventanal de la oficina, Dan Castles acarició con la mirada las líneas aerodinámicas del supercohete Tomahawk. Él, Dan Castles, había concebido este aparato en largas n
salida hacia la tierraMientras los fugitivos del Rayo viven sus portentosas aventuras en otra remota galaxia, la vida discurre en el planeta Tierra bajo el dominio de la Bestia Gris. Dos milenios ha
secuestro sensacionalSobre la punta de tierra que avanzaba hacia el mar, la penitenciaria levantaba sus sólidas edificaciones de piedra y su recinto amurallado, al que daban acceso dos macizas torr
silencio sobre mi tumbaDesde las cinco de la tarde llovía sin interrupción y a las seis era casi completamente de noche, brillando ya los focos de los «docks» a lo largo de los muelles. Como falto de
supervivenciaExiliados en Atolón, abandonados a sus propios medios, los deportados de “Valera” van a enfrentarse con dificultades insuperables para sobrevivir en un hiperplaneta gigantesco,
tierra de titanesVencida la tremenda peste que estuvo a punto de aniquilar los doscientos millones de habitantes del autoplaneta, los valeranos se enfrentan con la inquietante interrogante de a
todos eran jóvenesHORACE Power abonó la cuenta del taxi ante la puerta del hotel San Francisco y entró en el edificio con paso rápido y decidido. El uniformado portero le asaeteó con una crítica
un millón de añosDespués de viajar a la Tierra, y luego a través del hiperespacio hasta el anti-universo, el autoplaneta “Valera” regresa al circumplaneta Atolón. Trasladándose de un lugar a ot
una mujer para la tumbaDespués de dos horas de incansable interrogatorio, la tensión pareció remitir hacia las ocho de la mañana, cuando la celadora Mac Tavish entró en la habitación, llevando media
universo remoto¿Qué ocurrió después que el autoplaneta “Valera” consiguiera su independencia de la Confederación de Planetas? Respondiendo a la reiterada petición de los numerosos “fans” de l
venimos a destruir el mundoLa Tierra ha sido liberada de la opresión del Hombre Gris por el victorioso Ejército Expedicionario de Redención. Venus y Marte permanecen todavía ocupados por los “thorbod” cu
viajeros en el tiempoReconquistados los planetas terrícolas, Miguel Ángel Aznar se siente atraído por la curiosidad de probar la Máquina del Tiempo y viajar hacia atrás hasta el remoto pasado de la
vinieron del futuroPresintiendo que la familia alemana que los acogió durante su anterior incursión hubiera podido tener problemas, Fidel Aznar vuelve a la Alemania del pasado para encontrarse co
¡antimateria!Atravesando la zona misteriosa del hiperespacio, el autoplaneta VALERA alcanza una nueva dimensión desconocida, el macrocosmos antimateria. ¿Existe realmente el Universo en dos
¡luz sólida!Después de la última y decisiva victoria sobre la Bestia Gris, los planetas terrícolas vuelven a un largo periodo de paz y tranquilidad. En el monótono discurrir de los días, u
¡piedad para la tierra!Desde el aeródromo municipal de Kansas City hasta el céntrico hotel en donde había recibido misteriosa cita, el automóvil en que viajaba el general Tarrant tuvo que avanzar a p
¡thorbod!, la raza malditaLa saga de los Aznar comenzaba con la presencia de los misteriosos Hombres de Venus, que más tarde se darían a conocer por su auténtico nombre, los “thorbod” (Hombre Gris). Los
«ellos» están aquíSus dueños, ciertamente, no podían presumir de mucha imaginación. La llamaban «El Dorado», como centenares y tal vez millares de otras minas de oro de las que se habían explota