PAÍS LIBRO

Autores

spencer curtis

johnny burke ha vuelto

EL jinete paró su «nevado». Sí, era allí. Justamente allí. Él no lo había olvidado jamás en el transcurso de aquellos años, y por eso estaba absorto mirando el madero roído con aquellas letras grabadas a fuego, pero ya semiborradas por el tiempo: Breckenridge, año 1839. No estaba muy claro, pero podía leerse todavía.