última voluntad
El viaje de bodas de Carlos Morales y Alicia tocaba prácticamente a su fin después de más de un año de recorrer diversos países de Europa —Alemania, Francia, Inglaterra, Portugal y España—, habiendo embarcado por último en un puerto de la madre Patria para, después de una larga travesía por mar que había sido pródiga en sustos y sobresaltos, arribar al puerto principal de la costa Oeste de California, San Francisco, ciudad en la que llevaban varios días —hospedándose en el Gran Hotel Continental— y de la que partirían en breve para cubrir la última etapa de su dilatado periplo, regresando finalmente a Los Ángeles.