patrulla de chacales
El período de instrucción fue tan duro como lo habían imaginado. Tal vez algo más. Especialmente para Donald Moore, a quien el cadete instructor atosigaba de tal manera que no le dejaba ni un momento en paz. Pero el joven mestizo se lo tomaba con calma. Lo que más enfurecía a su instructor era, precisamente, la fría dignidad con que Donald Moore soportaba todas las humillaciones y los castigos.