pinocho, detective
Desde hacía algún tiempo ocurrían cosas misteriosas en la ciudad. Una banda de malhechores, perfectamente organizada, cometía a diario robos inauditos. El reloj de la torre había desaparecido; varios monumentos públicos se habían quedado sin estatuas; el elefante de la casa de fieras había sido escamoteado... Casi todos los días ocurría algo extraño y espeluznante. Las autoridades no se daban punto de reposo, pero no lograban descubrir a los bandidos. La ciudad estaba aterrorizada.