soy un forajido
Corder Ley quería huir de todo cuanto le rodeaba, y también de sí mismo. El desengaño había sido terrible. La mujer que amaba y el hombre en quien creyó hallar comprensión y nobleza se burlaron a espaldas suyas, cobardemente. Una furia salvaje se apoderó de Corder Ley. Pero era orgulloso como su rey, y fingió indiferencia. Tenía que abandonar High Tree, California. La que había sido su novia se casó con otro. Corder Ley se sentía humillado y colérico. Corder Ley era un hombre que amaba la Naturaleza. Soñaba despierto ante los subyugadores paisajes de aquella tierra que había escogido para vivir.