un avispero en londres
El anuncio por palabras fue publicado en un periódico matutino de Londres. Millones de personas habían podido leerlo, pero sólo un hombre había abandonado su habitación del hotel, dejando a una exuberante rubia escandinava en brazos de Morfeo. Tras caminar algo más de quinientas yardas, se introdujo en una cabina telefónica. Se calzó unos finos guantes de piel oscura y disco unos guarismos.