destino: ¡la luna!
La voz del mayor Holt llegó desde la Tierra al comunicador del navío espacial de transporte. —Joe, tengo muy malas noticias. El Servicio Central de Inteligencia tiene informes fidedignos de que, hace más de diez días, los enemigos de nuestro proyecto de exploración espacial, terminaron de construir por lo menos un cohete capaz de llegar hasta la órbita de la plataforma, con una carga que podría ser una bomba atómica. Se cree que han construido más de un cohete. Es posible que intenten destruir la plataforma espacial antes de que ustedes lleguen allí. —¿Hay algo que podamos hacer nosotros? —preguntó Joe tristemente, a través de cientos de kilómetros de vacío espacial. —¿Qué le sucede? —preguntó el mayor amargamente—. ¿No comprende que, si no consiguen descargar su navío, no podrán regresar a la Tierra?