PAÍS LIBRO

Autores

micky roberts

continente hostil

Clavados los pies en el suelo, hizo esfuerzos para detenerlo, pero se burlaba de él. Era como una serpiente de goma sujeta por la cola: se movía adoptando las más absurdas posturas. Tan pronto corría, como se convertía en una pescadilla que se mordiese la cola. Aquello era bastante serio y Roy empezó a sospechar que algún mandarín chino lo había embrujado. Pero de pronto el mostrador quiso estarse quieto y terminaron para él sus sufrimientos.