criminal homosexual
Marco era el líder. El Alfa. El Omega. El Amo. La Cabeza. Dueño de un imperio. Pero un imperio oscuro. Drogas, armas, bandas. Combate, sangre, muerte. Y todo a su cargo. El máximo responsable. El cerebro detrás. Y un blanco a eliminar. Ahí entraba Julio. Su nuevo guardaespaldas. Tan fuerte como Marco. Tan imponente como él. Pero más bronceado. Y más importante… … más abierto. En muchos sentidos. Hasta que convenció a Marco. Un líder de la mafia… … homosexual… … era un desafío. Y un problema.