voy a dar trabajo al enterrador
Kate era una muchacha muy bella, hija de Henry Fairfax. Al que en el pueblo, y por los vaqueros de Jonás Raven, llamaban cobarde sin que se inmutara al oírlo. La que sufría era la muchacha. Y hablando con su hermano, Ames, le decía mientras caminaban hacia casa después de cerrar el portalón que guardaba los caballos seleccionados y que más precio se obtenía por ellos.