PAÍS LIBRO

Autores

m. l. estefanía

¡ventajista!

Los dos jinetes galopaban con rapidez, con toda la rapidez que permitían las fuertes extremidades de los dos caballos que les transportaban. No hablaban entre sí, tal vez porque tendrían que hacerlo a gritos, sin éxito posiblemente; pero más seguro habría de ser por la preocupación de aquel grupo de caballos que a dos millas escasas de ellos galopaban con igual ahínco, montados por hombres cuyos propósitos no podían ser más explícitos para los fugitivos.