PAÍS LIBRO

Autores

m. l. estefanía

otra muesca

-Mejor será, forastero, que no te muevas. Te tengo encañonado. Levanta las manos. El aludido movióse lentamente, después de obedecer en lo que a las manos se refería, y miró a quién le habló, diciendo: —No es costumbre recibir así a los forasteros en el Oeste; voy de paso y no me preocupan esas diferencias que al parecer existen entre algunos ranchos de esta comarca. —¡Cállate! Eres uno de los que asaltaron la diligencia la última semana; Lewis Cromwell te ha reconocido. Es la tercera vez que eso ha sucedido y siempre que llevaba dinero en abundancia. Alguien os informa de este movimiento de dinero. Posiblemente algún empleado de Michael habló más de lo debido. Sabremos quiénes son vuestros cómplices. —¿Sabes lo que creo?