PAÍS LIBRO

Autores

m. l. estefanía

camino de santa fe

La diligencia se detuvo ante un grupo numeroso de curiosos y entre una inmensa polvareda acompañada por los juramentos más extraños de aquellos conductores que habían de llevar una mano en la brida y otra en el rifle, repartiendo la atención entre el camino y los posibles salteadores.