apólogos y milesios
Según las define Cervantes,"las milesias son fábulas disparatadas y que sólo pretenden deleitar aunque no enseñen nada, en tanto que las apólogas tienen como fin deleitar y enseñar". Y eso es lo que encuentra el lector: sabiduría extraída de la experiencia, bien aderezada con el deleite de un trabajo bien hecho, incluso cuando se traspasan los límites del disparate.