érase una vez en texas
La vida de Titi está patas arriba. Su marido, Tom, (¡qué pena no haberlo castrado a tiempo!) falleció por culpa de un repentino traumatismo “felacional” y, desde entonces, los problemas no dejan de acumularse. Facturas que no puede pagar, hijos descontrolados, una familia dividida, la cara, que se le está viniendo abajo después de los cuarenta… Por si fuera poco, la causante de dicho traumatismo, Jennifer, era hermana y mejor amiga de Titi. ¡¿En serio?! Perdida y harta de los cuchicheos, la mayor de las hermanas Patton se lanza de cabeza a una serie de aventuras que, al final, harán que recupere las riendas de su vida y, de paso, vuelva a creer en el amor. Solo hay un problema: la ha cagado como únicamente una Patton sería capaz de cagarla. Sip. Estrepitosamente. ¿Y ahora qué? ¿Hm?