nadie quiere a perdidoso
Cuando Mitch Crane, el de corazón bondadoso, viene a decirme que mató al marido de su última conquista, no me sorprendió mucho. Lo sorprendente es que una hora después, el cadáver del marido ha desaparecido, y ¿qué encontramos en su lugar? El bonito cuerpecito de la bella Janet, debidamente estrangulado. Entonces, ¿a quién engañamos?