un billete de diez dólares
La culpa de que Josef Lers cortase bruscamente su viaje hacia Anaconda y anclase en Butte, así como de los dramáticos acontecimientos que se produjeron más tarde, la tuvo el cajero del Banco Sindical al devolverle en el cambio de veinte dólares un billete de diez con cierta numeración muy interesante.