PAÍS LIBRO

Autores

fidel prado

tahures y pistoleros

ESCUCHE, forastero—advirtió una voz ruda pero simpática, al tiempo que una mano más ruda que la voz detenía a “Relámpago” por las bridas —. Si no tiene prisa en llegar rápidamente al infierno, espere un poco y no entre en la calle principal. Los aires plomíferos que van a correr por ella dentro de pocos minutos, no son muy saludables para el que desee vivir, y usted es joven.