PAÍS LIBRO

Autores

dean o'hara

cazador de abigeos

Era una noche lluviosa de abril. El viento gemía agitando las copas de los pinos y susurraba entre el follaje. Era una de esas noches ingratas e inhóspitas durante las cuales no hay nada mejor que permanecer bajo techado, al lado de una panzuda estufa o delante de una buena chimenea, atiborrada de leña.