tempestad en el cosmos
—¡Objetivo en posición! ¡Todo listo para el ataque! El comandante de la astronave, sentado en su puesto de mando, contemplaba la gran pantalla que tenía frente a sí y en la que se reflejaba la imagen de otra nave. A su alrededor había cuatro o cinco sujetos, todos ellos pertenecientes a su estado mayor. —¿Está listo el pelotón de asalto? —preguntó. —Listo, señor —contestó alguien, en otro lugar de la astronave. —¿Contramedidas de detección?