el caballero de las estrellas
Decían que era el último caballero andante pero, naturalmente, no llevaba refulgente armadura, ni usaba escudo, ni manejaba la espada. Sus armas eran la inteligencia, la tenacidad y, por supuesto, el valor sin límites, además de la pistola de láser, que solo utilizaba en muy contadas excepciones y solo para defender su vida, cuando la situación lo requería de un modo absolutamente irremediable.