el caso de los seis amores
Cierto que el gran periodista Dickinson, muerto con la cabeza aplastada por un tremendo golpe que le han dado con su propia máquina de escribir, era un hombre venenoso en sus artículos periodísticos que atacaba allí donde existía juego sucio y, además, su vida desordenada y galante, era un verdadero misterio para sus seis amores. No obstante, el culto y suave detective Stacpoole, tras una investigación verdaderamente modelo, va haciendo descubrimientos, atando cabos y al final desenmascara al asesino por lógica conclusión de un trabajo admirable