persiguiendo el sol
Un torbellino se acerca a Angel Sands... Tómese unas vacaciones de tomar vacaciones. Ese es el plan de Lydia Paxton cuando llega a Angel Sands para celebrar el bautizo de su sobrina. Organizar los viajes de su vida para su exclusiva clientela de Nueva York le ha pasado factura. Ahora solo quiere descansar, relajarse y pasar tiempo con su familia. Pero, como le dice su hermana, Lydia siempre deja devastación a su paso. Esta vez, la devastación se conoce con el nombre de Jackson Lewis. Tan pronto como la ve, Jackson conoce el problema de Lydia con mayúscula. El problema es que la atracción entre ellos está fuera de escala. Es bueno que Jackson haya renunciado a las relaciones hace años. Está seguro de que lo tiene todo bajo control. Hasta que este adicto al trabajo confirmado se encuentra a sí mismo como el padre adoptivo de un perro callejero, y haciendo novillos en el trabajo gracias a la influencia de Lydia. Y por la noche, ella está acurrucada junto a él en su cama. Ahora el reloj corre. Tienen doce días juntos y luego ella se irá. Todo lo que tienen que hacer es NO enamorarse el uno del otro.