sheriff por un día
Los dos jinetes se detuvieron en lo alto de la colina. Bañados por el sol. Un sol que, en la cúpula del horizonte, brillaba con fuerza descargando virulentos rayos. Desde allí se ofrecía un bello espectáculo. El valle, el arroyo de cristalinas aguas, las altas montañas, los desfiladeros... Y Moxey Creek.