curso de asesinato acelerado
Phillip Jackson. Ése es mi nombre. Un tipo con mala estrella. Me encuentro en una comarcal. A más de cincuenta millas de Chicago. Con un sol de fuego sobre mi cabeza. Acabo de perder el autocar Buttonsville-Chicago por cuestión de segundos. El próximo servicio pasará dentro de seis horas. Dos años soñando con tomar ese autobús. Y lo pierdo. Así soy yo.