tania sexton
ausenciaMe llamo Alejandra Pacheco Cortés. Desciendo de mexicanos, que, a su vez, descienden de españoles, pero he nacido en California, y soy… perfecta. No lo digo yo, lo ve cualquier
calla, nenita, callaCorre la década de los cincuenta, y para una muchacha como Bárbara no va a ser fácil salir adelante. Solo tiene quince años, es inocente, buena y con una belleza deslumbrante,
carita de ángelLa chica se quedó clavada en el sitio al ver a ese hombre montado a caballo, y supo antes de oír la voz grave y profunda, que era un yanqui. Ralph Hathaway buscaba a un muchach
como hilos de cristalJames Hazzard estaba acostumbrado a tener lo mejor. En todo. Pero cuando una noche se encuentra de sopetón en los lavabos del bar de un pueblo perdido de Montana con una bellez
cuando vuelvas a míCuando el duque de Allthon descubre a esa preciosa muchacha en una de las salas de su casa de Edimburgo, se le hace la boca agua. Se pregunta quién será, qué hace allí y, sobre
el águila negraAño 1850, Irlanda. Ivette estaba en una tierra extranjera, era muy joven, sin madurar y, para colmo, ante esos irlandeses era Iván, el primo pequeño de Hans. No sabía cuánto ti
el camino del pecadoEra dantesco. La guerra apunto de terminar y todo lo oscuro, lo inimaginable, iba saliendo a la luz.Se encontraba en el campo de exterminio de Bergen-Belsen, siendo liberado po
eres míaSoy feliz. Somos felices. He conseguido lo que quería gracias a mi astucia, inteligencia y sobre todo… valentía. ¿Valentía o locura? Qué más da. Tengo todo lo que quiero, lo qu
lento, más lentoSamantha, Erica y Beberly están dispuestas a disfrutar de la despedida de soltera de Pia, y qué mejor manera de hacerlo que en un rancho donde los vaqueros quieren que los invi
liberación«El amor, la lucha y la determinación se entrelazan en la electrizante secuela de “Perversión”, donde Cecily se adentra en un camino más incierto, más imprevisible y más ardien
oscuro y perversoJennifer jamás imaginó como podía cambiar su vida con una simple carta. Su hermana había fallecido junto a su marido, dejando a un bebé de meses a su cuidado. No estaba dispues
perversión«Aunque el mundo caiga a tu alrededor y el futuro sea oscuro, hay espacio al amor, hay hueco para el placer… y hay tiempo para la perversión». Nueva York, 1929Hubo un momento e
te lo prometo, confía en míCeilán 1855. La intensa mirada de Bran Kendrick se clavó fijamente en esa chiquilla morena de aspecto delicado, a pesar de la suciedad que la cubría. Tenía prisa por irse, un i