A través del angosto ventanuco llegaba a la cárcel el estrépito de los martillazos. Era la hora de la siesta, el ambiente bochornoso y el hombre que descansaba en su camastro a
En los primeros días del mes de septiembre, fueron confluyendo en la ciudad de Knoxville (Tennessee), los hombres jóvenes del clan Bogan: Christopher, el mayor, de veintiocho a