Igual que en el siglo XX desaparecieron imperios que parecían eternos, preceptos morales que habían durado mil años y dogmas científicos que resultaron falsos, en el XXI vamos
Nos gusta tenerlo todo bajo control, pero a la vez queremos que la vida nos sorprenda. Hay algoritmos para predecir el tiempo, los atascos y hasta el amor. Los hay que componen