Una noche, en el centro de Londres, tres amigos se reúnen para cenar. Dos de ellos acaban de enviudar y el tercero no tiene vida amorosa, sino desastres amorosos uno tras otro.
Félix Quinn se autodefine como un hombre feliz. Proviene de una familia de anticuarios de libros y es un bonvivant «que no podía concebir siquiera la posibilidad de vivir a más