mi novia está locaEra extraordinario el parecido de las dos mujeres. Sólo fijándose mucho, mirándolas muy de cerca, podía advertirse que la belleza de una de ellas era más fresca, más natural qu
pescando maridoTenía los ojos traviesos y la risa pronta. Sus dientes no eran perfectos, pero eran blancos y luminosos y daba gusto verla reír. Los labios, tan traviesos como sus ojos, parecí