Claudia dejó el trabajo perfecto para dedicarse a lo que realmente quería, aunque pocos a su alrededor consiguieron entenderla. Ella quiere llenar su vida de risas, de verdades
La nueva Claudia no escucha jazz ni lleva relojes raros. No recuerda cuando fue la última vez que hundió sus dedos en una masa fina y esponjosa ni el momento exacto en el que e