En la pequeña aldea vikinga se vivían tiempos difíciles. A la escasez de alimentos, había que sumar los nuevos tributos impuestos por un rey injusto. Por ello, el joven Oddo ha
Cuando Oddo vio al joven esclavo de Grimmr comer las semillas que había dejado para alimentar a los pájaros, pensó que aquel chico estaba rematadamente loco. Pero la prudencia
Thora y Oddo habían sido intercambiados en la fría noche de su nacimiento por una comadrona que había temido por la vida de uno de ellos. Como resultado, la pequeña Thora había